TORRENTE EXISTE

Que inteligencia, que sarcasmo y que creatividad mezclar lesbianismo con tortillas y bollos, homosexualidad con perritos calientes y plátanos. Este tío es un genio, cuanta elegancia, cuantos recursos literarios.
"Las bodas de lesbianas tendrán que incluir diversas variedades de tortillas, y de postre, bollitos con nata; y los convites para homosexuales serán a base de quimbos, perritos calientes y plátanos al horno [...]. Si se casan dos mariquitas y uno es muy, pero que muy mariquita, igual no pone pegas a colocarse las ligas, pero puede que acabe haciendo un strip-tease por las escaleras”
Este es el texto que hubiera deseado firmar el mísmismo Quevedo, pero no tal g

Sólo pretendía ser jocoso se ha excusado el susodicho artista de la metáfora, y para el texto anterior ese excusa puede valer pero para el que viene:
“Si la palmo antes de lo previsto, prohíbo que den a mis chiquillos en adopción a ningún matrimonio de gays, lesbianas o mediopensionistas. Sólo falta que los traigamos al mundo, los criemos y los eduquemos para que luego acaben los pobres rodeados de cualquier cosa”.
Torrentismo en estado puro y duro que alcanza su cénit cuando al hablar sobre la ley de igualdad rebuzna:
“La propuesta de paridad democrática lanzada por nuestro presidente regional me parece, más que una paridad, una parida [...]. Si ha de haber paridad para las mujeres, que la haya para los altos y los bajos, los listos y los tontos, los depresivos y los optimistas”.
La irrupción de este personaje en la vida política nacional fuerza a Santiago Segura a realizar una cuarta entrega de la aventuras de Torrente. "Torrente IV: Operación diputado", porque aunque cueste creerlo en las próximas elecciones el señor Dimas irá en una lista ¿imaginan de que partido? Hasta los obispos han organizado una misa de acción de gracias con bandeo de campanas y procesión incluída para celebrar tan magno acontecimiento y tan insegne candidato.
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